Parece mentira que ya hayan pasado veintidós años desde que se estrenó Desafío Total con un joven y triunfante Arnold Schwarzenegger y una Sharon Stone a punto de lanzarse al estrellato. La película, adaptación del relato de los años sesenta de Philip K. Dick “Podemos recordarlo por usted al por mayor”, se convirtió en su momento en la superproducción más cara de la historia y que contaba con las estrellas más taquilleras de principios de los noventa.
El argumento nos sitúa en el año 2084, donde Douglas Quaid,
un obrero de la construcción, lleva una vida tranquila salvo por las pesadillas
recurrentes que todas las noches le transportan hasta Marte. Así Douglas decide
acudir a los laboratorios de Recall, una empresa que ofrece vacaciones
virtuales, con el objetivo de materializar su sueño y poder comprenderlo. Pero la
fuerte acción de los alucinógenos hace aflorar en su memoria un verdadero
recuerdo en el que él era un agente secreto que actuaba en Marte. Esto le
obligará a ir hasta el planeta y descubrir su verdadera identidad.
A pesar de este potente argumento, Desafío total tuvo un
arranque algo difícil por el cual pasaron grandes personalidades del mundo
cinematográfico, desde diversos guionistas hasta distintos productores, actores
y directores. Sin ir más lejos, al principio fue David Cronenberg el elegido
para dirigir esta gran producción de la cual se escribieron hasta doce
borradores de guión que fueron rechazados. Posteriormente, Bruce Beresford ocupó
su puesto con Patrick Swayze como protagonista; pero cuando estaba ya todo
preparado para comenzar el rodaje, la compañía del productor de Laurentis y sus
problemas económicos paralizaron el rodaje. Finalmente la compañía de Carolco
Pictures adquirió los derechos gracias a la insistencia del propio
Schwarzenegger para que compraran el guión. Y así es como Paul Verhoeven,
director que ya había trabajado con Arnold en Robocop (1987), se puso a la
cabeza del proyecto.
El resultado fue una gran superproducción de acción (¿qué se
iba a esperar de una película de Schwarzenegger?) que goza de cierto
reconocimiento entre los cinéfilos y la ciencia ficción y que ha aguantado
bastante bien el paso del tiempo. A nivel técnico, los efectos especiales, que
le valieron su único Oscar, dejaron a más de uno boquiabierto; por no hablar de
la increíble y mítica banda sonora que potencia toda la película. Todo
esto acompañado de una fotografía colorista y de grandes contrastes que ayuda a
enfatizar todo el mundo retrofuturista creado para esta gran historia.
Y ¿por qué veintidós años más tarde se decide hacer un
remake? Este es uno de los grandes interrogantes que surgieron cuando se
anunció que durante este año podríamos ver una nueva versión de Desafío Total
protagonizada por Colin Farrel y dirigida por Len Wiseman. Quizás para muchos
parezca innecesario (como pasa con gran cantidad de remakes), pero para otros
puede tener cierto sentido. Que en un momento Desafío Total se planteara como
una superproducción pudo llegar a jugar en contra de la propia historia, habiendo
sido posible sacar más jugo a los caminos secundarios que se abrían en la obra
de Philip K. Dick y que llevaban a la verdadera reflexión y doble lectura que
se suele dar en el género de ciencia ficción. El propio Verhoeven nunca ha
considerado esta película como una de sus grandes obras a pesar de su
popularidad, llegando a afirmar lo siguiente “en Hollywood he hecho tres
películas bastante buenas, y son Robocop, Instinto Básico y Starship Troopers;
el resto son muy inferiores”.
Por otro lado, Len Wiseman no deja de decir que su
adaptación de la obra de K. Dick es mucho más realista y seria que la anterior.
Así que quizás nos encontremos con un Desafío Total que va más allá de la mera
espectacularidad, algunos chistes fáciles y se centra más en esa lectura
filosófica que se quedó en un atisbo de intento en la obra de Verhoeven. Hasta
que podamos ver si esto es así o no, os dejamos con el esperado tráiler, recién estrenado.
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